Manuel Garcés Jiménez
El 13 de septiembre es la fiesta religiosa y cultural que surgió como altepetl con cuatro calpulli (Cruztitla, Xochitepetl, Xaltipac y Tenantitla), fundado por guerreros mexicas.
La restauración del ex convento franciscano, con el atrio remodelado y la nueva Cruz Atrial de cantera que fue aportada por los vecinos, fue entregada por el Instituto Nacional de Antropología e Historia al pueblo de San Antonio Tecómitl, en la Alcaldía Milpa Alta de la Ciudad de México.
El Grupo Cultural «Somos Tecómitl» es el nombre integrado por entusiastas pobladores que sienten su identidad a través de la historia local, conocen su origen social, el amor, el cariño y el orgullo de ser oriundos desde el México prehispánico, surgiendo como altepetl con cuatro calpulli (Cruztitla, Xochitepetl, Xaltipac y Tenantitla), fundado por guerreros mexicas, y muchos años después llegaron durante la colonia española los primeros franciscanos con fray Martín de Valencia, quien promovió la religión católica en la región llevando la Cruz, lo que años después dio origen a la construcción del ex convento (hoy parroquia), con capilla abierta exclusiva para los nativos. A través del tiempo, Tecómitl ha dado personajes que han trascendido por su actividad profesional en lo científico, social, educativo, deportivo y cultural que han hecho de este pueblo el orgullo de la alcaldía de Milpa Alta y del sureste de la Ciudad de México. Citarlos conllevaría el riesgo de omitir a algunos.
Sentimos la satisfacción que en esta tierra fueron recibidos con entusiasmo y alegría el prócer de agrarismo, el general Emiliano Zapata, y el estadista Lázaro Cárdenas del Río, quien nos visitó durante tres ocasiones hasta la inauguración de la Secundaria Teutli el día tres de marzo de 1938, plantel que vino a sentar las bases educativas para las poblaciones de las alcaldías del sureste de la Ciudad de México, incluyendo los municipios conurbados con el estado de México. Nuestros antepasados nos legaron su espíritu creativo e inquietud por continuar trabajando, luchando y aportando el dinero suficiente para seguir con el progreso educativo, social y cultural de esta tierra, por lo que desde hace cuatro años aproximadamente, surgió el Grupo Somos Tecómitl, motivados por los ancestros que promovieron diversas obras materiales, como son la introducción del agua potable, construcción del kiosco, la Secundaria número 9, jardines para niños (kínder), las escuelas primarias, biblioteca regional, el Centro de Salud, el Centro de Estudios científicos y Tecnológicos del Instituto Politécnico Nacional, el gimnasio, el campo deportivo y la ampliación de calles, además de la donación de terrenos, entre otras obras de gran trascendencia social.
El grupo surgió como consecuencia del movimiento telúrico de 2017 que dejó al ex convento franciscano en consecuencias materiales lamentables, por lo que el sacerdote Loreto Ramos Roldán, junto con algunos vecinos y autoridades de la alcaldía, se dieron a la tarea de gestionar ante el INAH la restauración del inmueble, trabajo que llevó siete años, desde los trámites ante el organismo federal y la conclusión del objetivo.
Cabe señalar que la labor del sacerdote ha sido encomiable. En esta ocasión fue al motivar en los primeros meses de 2021 a los feligreses para que aportaran la cantidad de 15 mil pesos por familia para la adquisición de bancas de cedro de dos metros y medio de largo. Al principio la gente no respondía al llamado del sacerdote, por lo que ante tal situación surgió el Grupo Cultural Somos Tecómitl, con tan solo tres personas: Ernesto Blancas Lievano, Álvaro Yescas Flores y quien escribe esta crónica, con la idea de organizar un grupo e invitar a más personas para que aportaran mil pesos por familia (como una especie de tanda) cada quincena, a fin de poder completar el costo de una banca. Finalmente, se logró el objetivo con la cooperación de las siguientes personas: Los señores Alfredo Yescas Abad (q.e.p.d.), Álvaro y Alfredo Yescas Flores, Timoteo Villanueva Yescas, Manuel Garcés Jiménez, Virginia Garcés Jiménez, Ernesto Blancas Liévano, Virgilio Linares Arellano, Donato Blancas Noriega, Adrián Ramos Suárez y Rubén Longoria Cervantes.
La motivación del grupo continuó con la adquisición del reloj público mecatrónico de la fábrica El Centenario, en el estado de Puebla, dado que el anterior era mecánico, con la maquinaria totalmente obsoleta, misma que se puede admirar en el centro de las columnas, para lo cual los integrantes del grupo aportaron de su bolsillo los recursos económicos suficientes, gracias a Álvaro y Alfredo Yescas Flores, Armando Corona Sigala (q.e.p.d.), Ernesto Blancas Lievano, Manuel Garcés Jiménez, Antonio Valdez Jiménez, Wel Blancas San Emeterio e Israel Arellano González.
Además: Jaime Flores Medina, Hugo Blancas Alva, Noé Rueda, Loreto Ramos Roldán, Rubén Longoria Cervantes, Abel Juventino Flores Alva, Virgilio Linares Arellano, Víctor Alonso Villarruel, Jesús Aguilar, Alfredo Yescas Abad, Germán Francisco Antonio, Sergio Corella Olivos, Francisco Corella Olivos, Floriberto Ramos Cárdenas, Luis Fernando Blancas Alva, Tania M. Martínez Pradel, Wilfredo Arreola Calzada, Reyna Virginia Garcés Jiménez y Josefina Flores viuda de Yescas. Así como la aportación de Donato Blancas Noriega y Silverio Padilla Roldán.
Entre otras actividades realizadas por el grupo y con la participación de la familia Cabello, fue la restauración y limpieza del enorme jarrón de bronce que se encontraba descuidado donde originalmente se localizaba en lo alto de un prisma de una singular fuente que rememoraba la llegada del agua potable a este pueblo, el día 27 de noviembre de 1937, líquido proveniente de Monte Alegre, en el Ajusco Tlalpan; asimismo, se logra que el INAH reconozca al jarrón como Patrimonio Material de los mexicanos, pieza histórica expuesta públicamente a la entrada de la Calzada Las Palmas.
La inquietud del grupo por reencontrarse con su pasado histórico fue el traslado del único poste que existía, es uno de los primeros que se colocaron a lo largo de la Calzada Las Palmas y en cada una de las esquinas de la actual Plaza de la Corregidora en el año de 1953, estos iluminaban por tres horas con electricidad obtenida de un generador movido con tractolina que se encontraba al lado norte del inmueble de la Escuela Primaria República de Venezuela. Este poste se hallaba en el centro de la citada calzada, mismo que fue trasladado a petición del Grupo a un costado del Jarrón, como recuerdo, y que estuviera a la vista de las actuales y futuras generaciones.
Con la finalidad de volver oír en la Plaza de la Corregidora la música ambiental que se escuchaba desde 1972 a iniciativa de don Gumersindo Suárez Blancas, el Grupo adquirió el equipo actualizado con bocinas colocadas en la linternilla del kiosco. Es lamentable que las mezquindades de algunas personas trozaron en varias ocasiones el cable que alimentaba al equipo de sonido, hasta acabar con el proyecto de ambientación musical.
Otro triunfo del Grupo fue el trámite para justificar la remodelación del Atrio del ex convento franciscano con el recurso del Presupuesto Participativo en los Pueblos Originarios, el cual establece el gobierno de la Ciudad de México con un monto presupuestado de 7’925,476.10 millones de pesos, trámite encabezado por el señor Ernesto Blancas Liévano, iniciado el 9 de marzo de 2023 con el oficio dirigido a la alcaldesa Judith Vanegas Tapia, solicitando dar el visto bueno al proyecto en el que se hace hincapié de no involucrar al ex convento franciscano por ser considerado Patrimonio Nacional por el INAH, sino que el objetivo es limpiar y ordenar las áreas verdes para resaltar la arquitectura colonial del ex convento del siglo XVI.
El documento fue avalado por las autoridades tradicionales representativas del pueblo de Tecómitl, señores: Pablo Alberto Retana Villamar, coordinador territorial; Jorge Suárez Mendoza, presidente del Comisariado Ejidal, y Manuel Calderón Meza, concejero. Afortunadamente, este año del 2024 se concluyó el proyecto.
El interés por disfrutar una Plaza de la Corregidora más de una vez se limpió, se lavó el kiosco y el piso de la plaza, se reforestó donde hacían falta árboles de la especie laurel de la india, adquiridos en el estado de Morelos, así como limpieza y aflojamiento de tierra de las jardineras. El complemento de esta área de esparcimiento fue reanudar el funcionamiento de la fuente brotante que se encuentra a un costado del reloj público, con la limpieza del sistema de cómputo y la adquisición de bobinas para su funcionamiento.
Motivados por la próxima entrega del ex convento restaurado y la artística obra pictórica de su interior, el próximo 13 de septiembre de 2024, con motivo de la celebración de la leyenda de la Renovación del Cristo conocida como fiesta de La Preciosa Sangre, leyenda que data de 1863, lo cual Álvaro Yescas Flores, integrante del Grupo Cultural Somos Tecómitl con antelación organizó a los integrantes para recuperar la Cruz Atrial de cantera rosa mandada a realizar por artesanos del estado de Querétaro con una altura de 2.10 metros, misma que será colocada en el vetusto pedestal donde existía la original de piedra volcánica artísticamente labrada desaparecida durante los años de la Revolución, cuando el templo fue utilizado como cuartel por los carrancistas.
Al respecto, hace pocos años existía en ese lugar una Cruz de maderos rústicos de olivo colocada por La Santa Misión, a finales de la década de los años 50, hoy nuevamente provisionalmente vemos otra.
La nueva Cruz de cantera mantiene los ornamentos grabados muy parecido a las cruces del siglo XVI. Las personas que aportaron voluntariamente su cooperación económica para su realización, son las siguientes: Juan Ramos Díaz, Sergio Corella Olivos, Álvaro y Alfredo Yescas Flores, Germán Francisco Antonio, Virgilio Linares Arellano, Ernesto Blancas Lievano, Rubén Longoria Cervantes, Alfredo Yescas Abad (q.e.p.d.), Josefina Flores viuda de Yescas, Joaquín Abad, Rosaura Blancas Cueto, Israel Arellano González, Antonio Valdez y Hortensia Galicia Garcés; Loreto Ramos Roldán y Manuel Garcés Jiménez.
Asimismo, Jesús Aguilar, Francisco Corella Olivos y Abel Juventino Flores Alva; Noé Rueda, Alfredo Mendoza Ramos, Gabino Mendoza Ramos, Mario Ríos Villavicencio, Jaime Suárez Labarrios y Jesús Aguilar.
Los arquitectos especialistas en los trabajos del histórico inmueble, agradecen al sacerdote Loreto Ramos Roldán y al sacristán Francisco (Panchito) Moral, así como a la comunidad en general, por el apoyo en los trabajos, tanto en la restauración y pictórica, así como en la herrería.
Con la finalidad de hacer escuela para las actuales y futuras generaciones, se determinó por consenso colocar una placa metálica en una de las columnas del reloj con los nombres de las personas que cooperaron en la adquisición del reloj mecatrónico musical; asimismo, aparecerá a un costado de la Cruz la lista de los que apoyaron económicamente y en cada una de las bancas el donador.
Actualmente el grupo cultural Somos Tecómitl está integrado por 30 personas activas aproximadamente, con un 99 por ciento oriundas del lugar, quienes se reúnen cada quince días para dar información y proyectos a realizar.